Salmos 50:23 Pero el dar gracias es un sacrificio que verdaderamente me honra; si permanecen en mi camino, les daré a conocer la salvación de Dios.
Tantas veces te acercaste a Dios para pedirle, ¡y Él te respondió! ¡Cuántas otras veces viste Su mano poderosa cuidando y guiando tu vida!
Este Salmo te anima a dar gracias siempre, porque así lo honrarás verdaderamente, te mantendrás permanentemente en Su Camino, y disfrutarás de su amplia salvación en el presente y por la eternidad.
Orá así: Padre Dios, te doy gracias por tantas veces que me has respondido y me has liberado del mal; gracias porque en Jesucristo tengo perdón de pecados y vida eterna; gracias por mi familia; gracias por mi trabajo; gracias por todo lo que hiciste, hacés y harás. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Viernes!