Nuestra hermana Ana Blanco nos comparte un hermoso testimonio del poder de Dios. Su bisnieto sufrió una caída y pensaron que se había fracturado las piernas. Lo llevaron al médico, pero no le realizaron ningún tratamiento específico. Al día siguiente, el niño comenzó a presentar un sarpullido y aparecieron dos bultos entre la columna y los riñones. Además, orinó con sangre.