Siempre el enemigo querrá verte derrotado y postrado ante el fracaso, el dolor o el problema.

Todas nuestras batallas debemos pelearlas de rodillas, postrados, en adoración, las peleamos levantando el Nombre de Dios, porque de Él viene nuestra victoria.

Pero nosotros nos postraremos siempre ante el Señor: Rey de Reyes y Señor de Señores.
Pastora Mabel Toloza de Claus, Centro Cristiano Puerta Abierta, Sáenz Peña, Chaco, Argentina