Un día soleado, mientras Dominique paseaba por el bosque cercano encontró un antiguo libro cubierto de polvo y hojas caídas. Al abrirlo descubrió que era una Biblia muy antigua con páginas amarillentas y delicadamente encuadernadas. En ese momento sintió como si Dios mismo le estuviera hablando a través de ese hallazgo.
Recordó la cita del Salmo 119:105 que dice: "Tu Palabra es una lámpara que alumbra mi camino." Con cada página que leía su corazón se llenaba de asombro y entendimiento. Descubrió las promesas y enseñanzas de Dios encontrando consuelo en los tiempos de dificultad y sabiduría para enfrentar los desafíos de la vida.
El pasaje de 2 Timoteo 3:16-17 resonaba en su mente: "Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra." Con cada palabra que leía comprendía la importancia de estudiar y aplicar la Biblia en su vida diaria.
Con el tiempo Dominique se dio cuenta de que leer la Biblia no era suficiente, debía aplicar sus enseñanzas en su vida diaria. El versículo de Santiago 1:22 le recordaba: "No se contenten sólo con oír la palabra, pues así se engañarían ustedes mismos. Háganlo también."
Comenzó a compartir las Escrituras con su familia y amigos animándolos a profundizar en su fe y confiar en la sabiduría divina. Su amor por la Palabra de Dios se convirtió en una fuente de inspiración para todos los que la rodeaban.
En su búsqueda por conocer a Dios a través de su Palabra Dominique encontró respuestas a sus preguntas más profundas, consuelo en tiempos de angustia y dirección en momentos de confusión. El pasaje de Hebreos 4:12 se hizo real en su vida: "La palabra de Dios es viva y poderosa. Es más cortante que cualquier espada de dos filos y penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos. Juzga los pensamientos y las intenciones del corazón."
Reflexionemos en esto: La Palabra de Dios es una luz en medio de la oscuridad, una brújula que nos guía en cada paso de nuestro camino. Conocer y aplicar la Biblia en nuestras vidas es esencial para tener una relación profunda y significativa con Dios. A través de ella descubrimos su voluntad, recibimos instrucción y encontramos aliento y fortaleza.
Que este día sea una oportunidad para profundizar en la comunión con Dios a través de su Palabra. Que podamos conocerlo más y experimentar su amor y dirección en cada área de nuestra vida.
Bendecido mièrcoles!!!
