Salmos 86:11 “Enséñame tus caminos, oh Señor, para que viva de acuerdo con tu verdad. Concédeme pureza de corazón, para que te honre”.
Haz cada mañana, cada día, esta oración, para no errar en tu camino, para que tu corazón sea purificado honrando a Dios con tus actos y experimentando la bendición de Dios cotidianamente.
Ora así: Padre Dios, enséñame tus caminos, limpia mi corazón, perdona mis pecados, dame tu bendición. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Domingo!