No hagas lo malo, no permitas que te opriman

Panel content

Jueces 4:1-3 “Los israelitas volvieron a hacer lo malo a los ojos del Señor. Entonces el los entregó a Jabín, un rey cananeo de Hazor, quien oprimió a los israelitas sin piedad durante veinte años, hasta que el pueblo de Israel clamó al Señor por ayuda”.

Tanto cuando una persona o una nación hacen lo malo ante los ojos de Dios hay consecuencias.

En este caso todo el país estuvo 20 años esclavo, derrotado, empobrecido, humillado. Pero en el plano individual también se sufren las consecuencias del pecado: opresión económica, en la salud, en la familia.

¿Cuál fue y es la solución? Clamar a Dios por Su ayuda, porque de allí vendrá tu socorro y salvación.

Ora así: Señor. reconozco que estoy comiendo los frutos de mi pecado. ¡Perdóname! ¡Sálvame! Libra también a mi nación de toda opresión moderna y perdona nuestros pecados. Te lo pido en el Nombre de Jesús, amén.

¡Bendecido martes!

Suscríbete a nuestro boletín de novedades

Te vamos a comunicar lo más destacado.
Solo una vez por semana te enviaremos notas seleccionadas de nuestra web.