Eclesiastés 7: 11-12 "La sabiduría es aún mejor cuando uno tiene dinero; ambas cosas son de beneficio a lo largo de la vida. La sabiduría y el dinero abren casi todas las puertas, pero solo la sabiduría puede salvarte la vida".

El dinero no es malo, es de gran bendición, e incluso ayuda a abrir puertas. Pero sin sabiduría, es para perdición. El amor al dinero es la raíz de los males.

La sabiduría te salva, te enseña a poner en primer lugar a Dios, las cosas espirituales, y lo material pasa a segundo plano.

¡Sé siervo de Dios y que el dinero te sirva a ti!
Ora así: Padre Dios, decido ponerte a Ti en primer lugar en mi vida y te pido sabiduría, para ser salvo eternamente y ser próspero terrenalmente. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Jueves!