No Temas, Solo Cree

En Marcos 5, Jairo, un líder de la sinagoga, vivió un momento de desesperación cuando su hija estaba gravemente enferma. Fue en busca de Jesús con la esperanza de que Él pudiera sanarla, pero en el camino recibió la peor noticia: su hija había muerto. En ese instante, el temor pudo haberlo dominado, pero Jesús le dijo: “No temas, solo cree.”

 

El miedo nos hace dudar, pero la fe nos sostiene. Jairo tenía razones para temer: la realidad decía que su hija estaba muerta. Pero Jesús le enseñó que la última palabra no la tienen las circunstancias, sino Dios. En nuestra vida, podemos enfrentar situaciones que parecen imposibles: una enfermedad, una crisis financiera, un problema familiar. El miedo nos dice que todo está perdido, pero la fe nos recuerda que Dios sigue en control.

 

La fe no ignora la realidad, pero confía en la soberanía de Dios. Jesús no negó la situación de Jairo, pero le pidió que creyera a pesar de lo que veía. La fe no significa cerrar los ojos a los problemas, sino abrirlos a las posibilidades de Dios.

 

Caminar con Jesús nos lleva a ver milagros. Jairo decidió aferrarse a la palabra de Jesús y seguir caminando con Él. Cuando llegaron a su casa, Jesús obró un milagro: su hija volvió a la vida. Si seguimos caminando con Jesús, veremos Su fidelidad en nuestras vidas.

 

Piensa en un temor que te está afectando hoy. Escríbelo y luego busca una promesa de Dios que lo contrarreste. Cada vez que el miedo quiera apoderarse de ti, recuerda la palabra de Jesús: “No temas, solo cree.”

 

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Sáenz Peña – Chaco