El amor de Dios es tan inmensamente incomprensible que el Apóstol Pablo oró una oración poderosa pidiendo que los cristianos recibieran un poder sobrenatural para que “puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios” (Efesios 3:18-19).
El amor es una necesidad universal, y el amor de Dios es la respuesta universal.
El amor de Dios es incondicional, no como el amor del mundo.
Él es bondadoso con nosotros cuando somos buenos y también cuando somos malos.
Él desea que estemos completamente llenos de bondad y vida.
Él anhela para nosotros que seamos tan saturados de Su amor que se desborde hasta las vidas de otras personas también.
Haz que tu objetivo sea conocer al Dios verdadero para que Su amor se desborde. Medita en Su amor y deja que cautive tu corazón. Aprende a verte como Él te ve, seguro en Su amor por ti.
¿Dejarás que tu corazón sea transformado? Cuando el amor de Dios fluya libremente dentro de ti y a través de ti, cambiará al mundo.
Bendecido Fin de Semana!!!