Proverbios 4:20-23: Hijo mío, presta atención a lo que te digo. Escucha atentamente mis palabras. No las pierdas de vista. Déjalas llegar hasta lo profundo de tu corazón, pues traen vida a quienes las encuentran y dan salud a todo el cuerpo. Sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida.

Hoy termina el año y es un buen día para dejar atrás todo lo que contamina tu mente y enferma tu cuerpo: enojos, rencores, celos, pensamientos negativos. ¡Que nada detenga tu crecimiento!.

Comienza el año llenando tu corazón con las sabias Palabras de Dios, guárdalas y ponlas en práctica, así activarás y te alcanzarán las promesas de Dios.

Ora así: Padre Dios, en este nuevo año decido cuidar mi corazón llenándolo de tu Palabra, para que mi mente tenga luz, mi cuerpo sanidad, y pueda hacer prosperar todo lo que emprenda. En el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Sábado!
¡Feliz Año Nuevo!