×

Advertencia

JUser: :_load: No se ha podido cargar al usuario con 'ID': 53

No te conformes con menos, Dios tiene lo mejor

Siempre creí en aquello de no clavar demasiado hondo las estacas de nuestra carpa (tienda). De esa forma podremos estar dispuestos para cualquier movimiento que provenga del Señor.

 

Estar atentos a la voluntad de Dios es, felizmente, parte de nuestra propia vida familiar. Y en todos estos años hemos aprendido que en la medida en la que estemos dispuestos, Él nos llevará por un sendero ascendente de perfección. Sólo hace falta estar sensibles a su voz y no perder de vista la dirección de su nube.
 
La comodidad y el conformismo no sólo nos vuelven sordos a las estrategias de Dios, sino que han llevado a muchos cristianos a hacer campamento (fijando profundamente las estacas) y a construir después un “edificio” inamovible que los aleja de toda frescura del cielo y de toda “novedad de vida”.
 
Es grave tener la certeza en el corazón de que Dios tiene una tarea grande para nosotros y no tener el suficiente valor para dar el paso.
 
La indecisión siempre es la peor de las decisiones. El cristiano no debe “jugar a lo seguro” si no quiere correr el riesgo de quedarse muy por debajo de lo que Dios tiene para él.
 
Reafirmemos esto con una oración: “Jesús, necesito tu dirección para encausar mi vida en tu perfecta voluntad. Prometo darte a cambio mi obediencia y mi mejor disposición. Quiero ganarme tu llenamiento y tu paz”.
 
“Mirad, pues, con diligencia como andéis, no como necios sino como sabios” (Efesios 5:15)
 
Por Marcelo Laffitte

Suscríbete a nuestro boletín de novedades

Te vamos a comunicar lo más destacado.
Solo una vez por semana te enviaremos notas seleccionadas de nuestra web.