1 Reyes 10:1-3 "Cuando la reina de Saba se enteró de la fama de Salomón, fama que honraba el nombre del Señor, fue a visitarlo para ponerlo a prueba con preguntas difíciles. Llegó a Jerusalén con un gran séquito de asistentes y una enorme caravana de camellos cargados con especias, grandes cantidades de oro y piedras preciosas. Cuando se presentó ante Salomón, habló con él acerca de todo lo que ella tenía en mente. Salomón tenía respuestas para todas sus preguntas; nada le resultaba demasiado difícil de explicar".
La reina de Saba necesitaba consejos para gobernar, y recorrió un largo camino para encontrar la sabiduría de Dios, para que toda su nación sea bendecida.
Esto mismo debe hacerlo desde un político, un empresario, un educador, hasta un padre, un hijo; porque Dios sigue teniendo todas las respuestas, todas las salidas, para cada situación que atravesás.
Orá así: Padre Dios, tomo la decisión de buscarte para encontrar la respuesta a todas mis necesidades. Abrí mis ojos espirituales para ver la salida, iluminá mi mente para actuar sabiamente. Danos gobernantes como aquella reina que te busquen para que nuestro país sea bendecido. Te lo pido en el Nombre de Jesús, amén.
¡Bendecido Martes!
