Agradecer cantando, agradecer con el corazón quebrado de dolor, agradecer ¿aunque duela tanto?
La respuesta es SI
Porque estamos en Su Escuela, en Su horno, donde dejamos de creer o esperar de las personas y comenzamos a elegirlo a Él, a anhelar agradarle a Él, a no querer que se vaya de nuestro lado. Y las buenas acciones fluyen, porque vienen de una vida que está rendida, que solo hace lo que hace, para Dios.
No es un trabajo fácil. A muchos les costará entenderte o te tomarán por tonta/o,
¿Cómo es que no vas a defenderte? dirán algunos, ¿cómo es que solo vas a orar? dirán otros ¿Cuánto tiempo vas a esperar esa promoción, que se arregle tu matrimonio o que cambie el diagnóstico médico?
La respuesta, en esos casos, será, hasta que Dios decida que mi tiempo de prueba pasó, que he avanzado un paso y que soy capaz de ser depositario/a de Su gloria, que todo por lo que oré, llegará. Hasta que Él quiera y Como Él quiera.
¿No es la mejor manera de agradecerle?
De la redacción de encendidosporelespiritu.com.ar
