Gálatas 5.24-25 DHH: "Y los que son de Cristo Jesús han crucificado ya la naturaleza del hombre pecador junto con sus pasiones y malos deseos. Si ahora vivimos por el Espíritu, dejemos también que el Espíritu nos guíe".
El cristiano espiritual crucifica sus pasiones y deseos y decide dejar que el Espíritu Santo lo guíe.
El Espíritu Santo no te va a guiar a cometer pecado sexual, a vivir en la mentira, a vivir una doble vida.
El cristiano espiritual sabe que:
1 Corintios 6.12: "Todas las cosas me son lícitas, más no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, más yo no me dejaré dominar de ninguna".
NVI: "Todo me está permitido", pero no todo es para mi bien. "Todo me está permitido", pero no dejaré que nada me domine.
Cuando uno vive en el Espíritu, vive en libertad. Cuando uno le da lugar a la carne, termina enredado y dominado por algo o por alguien.
Esos 120 que el libro de Hechos nos cuenta que fueron llenos del Espíritu Santo, decidieron vivir como cristianos espirituales y el Espíritu Santo los llevó a vivir una vida llena de poder.
Predicaron a Cristo con valentía, no se avergonzaron del evangelio. Hicieron crecer la iglesia. Fueron promotores de crecimiento.
Se movieron en lo sobrenatural. Dios los usó en milagros y señales. ¡Eran imparables!, ¡Inquebrantables!
¡¡Dios lo quiere hacer otra vez!!!!
Pra. Mabel Claus Centro Cristiano Puerta Abierta Sáenz Peña, Chaco, Argentina