Cambio de genética

La genética, es lo que se transmite de generación en generación, no solo en lo físico, sino también en las emociones, y en los deseos. Hay cosas que trajimos en nuestros genes que no nos favorecen.Y podemos caer en la desesperanza, y vemos el panorama como ese valle de huesos secos, en muchos casos son espíritus hereditarios, una genética maldecida.

 

 
Ezequiel 37:1-14 "La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos. Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto secos en gran manera. Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová.
 

Profeticé, pues, como me fue mandado; y hubo un ruido mientras yo profetizaba, y he aquí un temblor; y los huesos se juntaron cada hueso con su hueso. Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel cubrió por encima de ellos; pero no había en ellos espíritu. Y me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha dicho Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. 10 Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en extremo.11 Me dijo luego: Hijo de hombre, todos estos huesos son la casa de Israel. He aquí, ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, y pereció nuestra esperanza, y somos del todo destruidos. 12 Por tanto, profetiza, y diles: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo abro vuestros sepulcros, pueblo mío, y os haré subir de vuestras sepulturas, y os traeré a la tierra de Israel. 13 Y sabréis que yo soy Jehová, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de vuestras sepulturas, pueblo mío. 14 Y pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar sobre vuestra tierra; y sabréis que yo Jehová hablé, y lo hice, dice Jehová.

Dios está haciendo transformaciones, está haciendo cambios positivos, de bendición, que harán que las relaciones sean de gozo, alegría, y paz. Si lo quieres, necesitas un milagro. Dios está muy interesado en que volvamos a nuestro original, Él está interesado en tu vida, y en tu familia.
 
La palabra muerte quiere decir "separación" es decir, en la muerte se separa el cuerpo del alma y espíritu. Sin embargo, hoy, esta separación está ocurriendo en las familias, se están separando.
 
En este pasaje de las Escrituras, Dios toma al Profeta y lo lleva a un valle de huesos secos, sin vida, en el valle de los que habían perdido la batalla.
Dios le dijo que profetizara, y cuando el Profeta dio la palabra, los huesos se comenzaron a unir.
 
 
Y eso es lo que Dios quiere hacer con nuestras vidas y familias, él quiere restaurar lo que estaba seco, y unir lo que estaba separado.
 
¿Cómo puede ser que ese escenario de perdedores, de derrotados, se convirtió en un ejército grande en extremo? El primer paso es declarar bendición, sobre lo que vemos en nuestras vidas y familias que está muerto, y separado.
 
 
 
 
Sin embargo, ¡hay esperanza! pues, como lo vemos en este pasaje, si Dios hace algo, este panorama, esta genética se va a transformar, si Él lo hace se va a transformar. ¡Declara aquello que no ves!
 
Lo segundo, es que necesitamos al Espíritu Santo que sople sobre nuestras vidas.
La genética espiritual viene cuando el Espíritu Santo viene sobre nuestras vidas.
Cuando tienes la vida del Espíritu, tienes un milagro, pues, cuando Él viene sobre nosotros, engendra en nosotros el gen de Dios, y tu no haces la fuerza, nuestra batalla es mantenernos conectados con el Espíritu, pero la obra de transformación es de Él.
 
 
 
Juan 1:12.  Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de llegar a ser hijos de Dios
Lo que resulta por estar unidos con el Espíritu, son sus frutos. Gálatas 5:22.  Pero el fruto del Espíritu es: amor, gozo, paz, longanimidad, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
 
La llave no está en cuanta fuerza haces para cambiar tu carácter, sino en cuánto te relacionas, lo amas, lo deseas al Espíritu, esto es lo que genera el cambio.
 
Hoy estas aquí, no por tus fuerzas, sino porque Dios te eligió.
"Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos, y serás mudado en otro hombre." 1 Samuel 10:6.
 
Hoy el Espíritu Santo está por soplar para levantar a esos guerreros, llenos de gozo, alegría, de fe.
 
 
Hasta que el Espíritu Santo no cambie tu genética interna, seguirás mirándote en el valle de la desesperación, de los huesos secos. Dios tiene que hacer algo.
 
Dios está, por Su Espíritu transformando las mentes y poniendo el fruto del Espíritu, amor, gozo, paz, paciencia, benignidad. bondad, fe, mansedumbre, templanza... Esa es la generación que Dios preparará, una generación de fe.
 
El día en que el Espíritu Santo te tocó, puso Su nueva genética en ti. Y los que tienen la genética del Espíritu son los que hablan fe, los que aman la Palabra y viven por ella.
 
 
Ya no soy lo que era, soy lo que el Espíritu Santo hizo en mi.
¡Tenemos la genética del Cielo! ¡El Espíritu Santo nos levantará!
 
El Espíritu de Dios te está preparando para un nuevo tiempo. Sólo necesitamos que Él sople, porque el Espíritu Santo está tan activo como en los días del profeta Ezequías.
 
 
 
 
Pastor Robert Acosta, Centro Cristiano de Avivamiento, Resistencia, Chaco, Argentina.
 
 
 

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