San Juan 4:49-53 "Señor, por favor, ven ahora mismo, antes de que mi hijito se muera. Entonces Jesús le dijo: Vuelve a tu casa. ¡Tu hijo vivirá! Y el hombre creyó lo que Jesús le dijo y emprendió el regreso a su casa. Mientras el funcionario iba en camino, algunos de sus sirvientes salieron a su encuentro con la noticia de que su hijo estaba vivo y sano. Se dio cuenta de que la sanidad había ocurrido en el mismo instante en que Jesús le había dicho: «Tu hijo vivirá». Y tanto él como todos los de su casa creyeron en Jesús.»

Todo el poder que tenía aquel gobernante no podía resolver su problema, por lo que finalmente tuvo que acudir al único que tiene todo el poder: Jesús.

Recurrí a Dios, ahora mismo, y como sucedió con el hijo de aquel funcionario, verás sanidad, tu negocio resucitará, tu familia se restaurará, todo lo dañado se renovará.

Te acostumbraste a recibir malas noticias. Abrí tu corazón y te sorprenderán las buenas noticias que llegarán a tu vida por el poder de Jesús.

Orá así: Padre Dios, hoy decido buscarte para poner mis problemas en tus manos, creyendo que todo me saldrá bien. En el Nombre de Jesus, amén.
¡Bendecido Lunes!