Si un amigo está con vos en tu momento malo, es amor
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Si algo he aprendido con el paso de los años, es que el amor permanece y está contigo en todo tiempo. Cuando alguien te extiende una mano, te abraza en momentos de soledad, seca tus lágrimas en medio de la tristeza, te sostiene en circunstancias difíciles, aunque él o ella tampoco estén pasando por el mejor momento, eso es más que ayuda: eso es amor.
Aprende a valorar y celebrar las personas que han permanecido. A veces nos enfocamos tanto en las pérdidas, en llorar a las personas que salen de nuestra vida, que nos olvidamos de reconocer, valorar y celebrar a quienes han permanecido.
¿Quiénes son esos tesoros que te sostuvieron en tu peor momento? ¿Quiénes son esos amigos fieles y leales que están contigo? ¡Celébralos! No estás solo(a), Dios te ha rodeado de personas llenas de Él con quienes puedes cultivar relaciones fuertes y duraderas. Y recuerda: así como te han extendido la mano a ti, extiéndela a ellos sin condición.
“El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta” (1 Corintios 13: 4-7)
